Consejos para estar bella durante el embarazo

Durante el embarazo aparecen las estrías, las manchas y cambios importantes en la piel entre otras molestias, que con las previsiones necesarias podemos atenuar y hasta evitar.

Durante el embarazo, la epidermis de la mujer va cambiando, aparecen estrías, se da un aumento de la pigmentación, se produce una aparición de manchas, incrementa notablemente la sudoración y la hipersecreción de las glándulas sebáceas.


Éstos cambios que se presenta son totalmente naturales, pero existen cuidados que pueden ayudar a mejorar su apariencia y reducir el malestar que muchas veces padecen las mujeres embarazadas por estos síntomas.

Cuando se padece el oscurecimiento de la piel y las manchas oscuras se las conoce como cloasma o máscara del embarazo, estas pueden ir apareciendo mientras el feto va creciendo, y se debe a la hormona estimulante de los melanocitos.

Este aumento en la pigmentación puede presentarse en el rostro, frente, pómulos, a los lados de la nariz y labio superior, así como también alrededor de los pezones, en la línea media abdominal y en los órganos genitales externos de las mujeres.

Cuando esto sucede se recomienda evitar la exposición a los rayos solares entre las 9:00 a.m. y 4:00 p.m. Es preferible no utilizar protector solar durante los primeros tres meses de gestación, solo que sea estrictamente necesario, ya que las sustancias que contiene, aunque sea un producto de uso tópico como el protector solar, pueden ser absorbidas por el organismo y, en algunos casos, puede llegar a causar malformaciones fetales.

Una vez concluido el primer trimestre estos productos se pueden usar con mayor seguridad, pero se aconsejan todos aquéllos que no contengan vitamina A en su preparación. El protector solar se debe reaplicar cada dos horas si es que la mujer realiza algún tipo de actividad expuesta al sol.

Es muy importante observar que el cloasma o la máscara de embarazo desaparecen en algunas mujeres luego de dar a luz, pero en otras no. Por este motivo se le debe dar mucha importancia del cuidado frente al sol.

Usar diariamente las cremas humectantes naturales a base de almendra dulce, de oliva o de coco y el un aumento progresivo de peso, por lo menos de dos a tres libras por mes, pueden ayudar a prevenir las tan indeseadas estrías.

Las estrías se originan comúnmente por la sobre distensión de la piel, por lo cual aumentar más del peso recomendado incide en su pronta aparición, produciendo marcas en la piel que en algunos casos no desaparecen.

Se debe usar especialmente las cremas humectantes desde el segundo o tercer mes de embarazo, ya que es cuando regularmente comienza a crecer el abdomen prominente. Sin embargo, la mejor hidratación de la piel es a través de la vía oral mediante la ingesta de ocho vasos de agua al día.

A pesar de las medidas que se toman, aparecen las estrías, por lo cual es mejor que la mujer espere tratarse después de la lactancia, ya que, en ese momento, podrá recurrir, a tratamientos tópicos con retinoides o técnicas con láser que podrán mejorar el aspecto de las estrías.

Se debe hacer una limpieza de la piel durante el embarazo ya que esta se torna más sensible. Muchas de las cremas que usan las mujeres pueden generar alergia cuando se está embarazada. Para poder hacer una limpieza de cutis, se recomiendan los jabones neutros y suaves, como son los de avena.


La mujer debe evitar durante el embarazo los tratamientos antienvejecimiento, como son las cremas antiedad o aquellas que contienen retinoides, es decir, vitamina A o algunos de sus derivados. Esto se debe a que éstas pueden contener ácidos alfahidroaxidos (AHA), como ácido glicólico, láctico, ácido ascórbico o vitamina C que se absorben y pueden ocasionar toxicidad en el feto.

También se tiene que evitar el uso de aquellas cremas que tengan corticoides y es preferible no depilarse con cera durante el embarazo para poder evitar las manchas permanentes.

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